5 negocios que nadie vio venir

Kloutit: lidiar con los contracargos en el ecommerce

Un chargeback o contracargo es una devolución de dinero al pagador de alguna transacción, especialmente una transacción con tarjeta de crédito. Puede obedecer a distintos motivos, desde que el cliente no reconozca una transacción hasta una devolución por producto defectuoso o cualquier otra causa. El impacto en la empresa es importante, tanto en costos financieros como de reputación.

Para combatir el problema en Kloutit han desarrollado una herramienta tecnológica basada en el uso de inteligencia artificial que se materializa en un software para la gestión automatizada los chargebacks. El sector en el que opera Kloutit corresponde al del ecommerce en general proponiéndose “darles el poder a las empresas de defenderse de una injusticia».

La idea de negocio corresponde a Albert Algarra (CEO), su hermano Adrián Algarra (CPO, y Alexis Pairetti (CTO). Lo que les unió hace 14 años no fue el emprendimiento, sino la creación de una banda de música. Sus trayectorias profesionales han hecho que ahora vuelvan a coincidir en este proyecto después de que Albert, criminólogo de formación y después de más de 7 años trabajando en departamentos de fraude, se percatase del problema de las empresas para lidiar de forma eficaz con el chargebacks. La diseñadora de UX UI Vicky García-Romeral se sumó al proyecto desde el inicio.

Mejora exponencialmente la eficiencia

Según los fundadores, “Kloutit ofrece una solución inexistente a un problema global. Actualmente, las empresas no tienen cómo gestionar los chargebacks de forma eficiente, realizando un trabajo manual para la defensa de los mismos. Kloutit, a través de sus algoritmos e IA, puede mejorar exponencialmente la eficiencia de este proceso y la eficacia del mismo”.

Aseguran también haber tenido “una tracción sorprendente” desde que lanzaran el producto al mercado tras constituir la sociedad en Terrasa (Barcelona) en febrero de 2024. De hecho, el mayor reto que dicen haber afrontado hasta la fecha es “poder dar abasto a todo el producto que semanalmente se sube a producción”. Para solventarlo pretenden dotarse de un equipo altamente cualificado del que forman ya parte siete personas.

La inversión hasta la fecha procede de recursos propios, en el inicio, y de la aportación de una docena de inversores después. Kloutit factura a sus clientes a éxito con una comisión de un 5% del importe total recuperado. Asimismo, para empresas consideradas enterprise, realiza estudios personalizados y crea planes a medida.

La compañía cuenta ya con clientes internacionales, aunque el foco todavía lo tienen en la captación de clientes nacionales y latinoamericanos. “De todos modos, Kloutit pretende abarcar todos los mercados Europeos de una forma ágil, debido a la gran capacidad de escalabilidad y adaptación de la plataforma”, aseguran. A finales del año pasado, la empresa consiguió cerrar su primera ronda de financiación en la que captó 540.000 euros.

Flanks: El lado tecnológico de las entidades financieras

A finales del año pasado cerraron una ronda serie A por valor de 7.4 millones de euros. La idea que atrae el interés de fondos como Earlybird Venture Capital, JME Ventures y 4Founders Capital, entre otros, se basa en “facilitar el trabajo de gestores de patrimonio e inversores, ayudándoles a conectarse a entidades financieras de todo el mundo de manera fácil, sencilla y segura”, en palabras de Joaquim de la Cruz, CEO y cofundador de Flanks.

El nombre de Flanks resulta de la suma de dos palabras en inglés: flank (flanco) y bank (banco) dando a entender la aspiración de esta compañía de convertirse en el lado tecnológico de las entidades financieras.

Con estas miras, de la Cruz, Sergi Lao (CTO)y Álvaro Morales (Chief Strategy Officer) constituyen la compañía en 2019 como “una empresa financiera digital que facilita el trabajo de gestores de patrimonio e inversores, ayudándoles a conectarse a entidades financieras de todo el mundo de manera fácil, sencilla y segura. Esto permite que el cliente pueda hacer una agregación fluida de datos en la plataforma de reporting que escoja, asegurando una visión 360° de su panorama financiero. Y, que con esta información, pueda tomar decisiones informadas y contrastadas sobre el futuro financiero de su cliente”, explican.

Fuerte crecimiento

La API para servicios patrimoniales automatizados de Flanks cuenta ya con numerosos clientes y de índole muy diversa, desde grandes instituciones financieras hasta family offices y asesores financieros independientes. En este momento, mantiene conexiones con más de 300 instituciones financieras internacionales y procesa más de medio millón de carteras de inversión al mes. A todos ellos aplica el modelo de pago por uso de Software as a Service (SaaS).

La empresa, con sede en Barcelona y un equipo de 36 personas, es hoy por hoy líder de su mercado en España y Francia. Pero como la solución de Flanks es global y fácilmente aplicable en cualquier parte del mundo, cuentan también con clientes en Andorra, México, Suiza, Portugal, Chile, Brasil, EAU, Alemania, Inglaterra, Luxemburgo, Perú, Suecia y Finlandia.

Así es como han podido ir multiplicando la facturación a un ritmo entre x3 y x5 al largo de su historia y piensan seguir haciéndolo este año. En cuanto a la clave del éxito, ellos mismos la explican: “Haberse especializado en un nicho de mercado poco conocido por la mayoría de emprendedores. Un mercado que cuenta con un alto componente de manualidad en sus tareas. Lo que ha hecho Flanks en todo momento es crear tecnología propia que permite solucionar problemas muy específicos de esta industria. Además, ha sido capaz de adaptarse a las diferentes regulaciones, tener un negocio financieramente sano y mucha flexibilidad en su desarrollo tanto de producto como comercial”.

A la larga su deseo es “convertirse en el estándar de Open Wealth en la industria de la gestión patrimonial, con el objetivo de que todo el mundo pueda tener servicios de wealth management sin necesariamente pertenecer a un colectivo con un patrimonio muy alto”.

Vita Construcciones: El nuevo concepto del lujo inmobiliario

Los impulsores del negocio presumen de haber puesto a Vita Construcciones en el en top 5 de empresa boutique de proyectos prime en Madrid y de ser la primera empresa constructora growth de España. Desde esta posición se considera un empresa robusta y preparada para alcanzar los 20M € de contratación de obra en 2025.

El nombre de Vita Construcciones resulta de la suma de los apellidos de los fundadores, Carlos Vigaray y María Talegón, coincidiendo a la vez con el significado de ‘vita’, traducido del latín como ‘vida’ que, a juicio de los promotores representa a la perfección el propósito de la empresa: “dar nueva vida a los espacios y convertirlos en lugares donde se construyan historias, emociones y futuro”.

Vita Construcciones forma parte de Vita Group donde se especializan en ejecutar proyectos residenciales de nueva construcción así como la rehabilitación y transformación de espacios mediante proyectos boutique. Dentro del mercado premium de Madrid llevan también a cabo el desarrollo de oficinas y proyectos smart living. “Nuestra misión no es solo construir, sino ofrecer a promotores seguridad en sus inversiones creando espacios que sean diferenciadores, sostenibles y personalizados”, afirma Vigaray.

Como parte de Vita Group, en los planes de 2025 entra la creación de una nueva unidad denominada Vita Capital mediante la que identifican y transforman activos inmobiliarios en inversiones de alto valor agregado. La apertura de esta línea de negocio surge a raíz de que Vigaray observara problemas en las fases de adquisición, diseño y ejecución de proyectos por parte de muchos promotores, family office, fondos de inversión y operadores del mercado. En esta línea prometen rendimientos hasta un 5% superiores a la media del mercado. 

En lo que respecta a la vertical de construcción, el modelo pone al promotor en el centro buscando satisfacer todas sus necesidades. Con estas miras aplican su ‘metodología growth’, mediante la cual garantizan la optimización de tiempos y costos en cada una de las fases del proyecto. Integran, además, sostenibilidad y tecnología para redefinir el concepto de lujo y agregando valor al activo.

Un origen familiar

La historia de Vita Construcciones tiene su origen en 1953, surgida de una empresa familiar en la que Carlos Vigaray representa a la tercera generación y acomete la modernización de la compañía y la reconfiguración del modelo de negocio. En 2013, con una inversión de 2.000 euros, emprende lo que denomina la versión 2.0 de la empresa con la misión de “reinventar la construcción boutique en Madrid” basándose en un enfoque conjunto de gestión ágil y estratégica aplicado a todas las fases de un proyecto inmobiliario.

No obstante, el reto mayor lo afrontaría en 2020, tras sufrir un grave accidente de moto que coincide con la pandemia. Dos años le llevó la recuperación personal y la de la compañía escalándola poco. El reto actual se lo plantea la falta de capital humano cualificado. Aún así, para 2025 prevén alcanzar los 20 millones de euros de contratación de obra manteniendo su filosofía de apalancamiento financiero moderado y estratégico al objeto de asegurar “un escalado natural y sostenible de la compañía”.

La idea es seguir consolidando el liderazgo en Madrid y ampliar la influencia de la compañía a escala internacional, especialmente en los servicios de inversión inmobiliaria y gestión de proyectos boutique. Asimismo, se plantean diversificar la propuesta de valor mediante la creación de nuevas empresas dentro del ecosistema Vita hasta convertir al grupo en “referente global en el mercado premium, con una red sólida de clientes internacionales, inversiones diversificadas y servicios integrales que redefinan la excelencia en construcción y real estate de lujo”.

Meloom: la academia de música del siglo XXI

Enmarcados dentro del sector EdTech, Meloom pone el foco en la enseñanza musical, concretamente en la democratización del aprendizaje a tocar un instrumento algo que, a juicio de Ivan Jimenez Berbes y Víctor Manuel Velasco Barea, impulsores de esta idea, ambiciona un 70% de las personas.

Para no anular vocaciones, proponen una solución personalizada que se adapta a la conveniencia a cada alumno en términos de  disponibilidad de tiempo, ubicación, gustos, nivel, economía, forma de vida y objetivos. Lo consiguen gracias a una tecnología basada en inteligencia artificial y algoritmos de machine learning, desarrollados en colaboración con el MTG (Music Technology Group) de la Universidad Pompeu Fabra e Interacso, empresa líder en el sector del desarrollo tecnológico sostenible. Consiguen así trazar itinerarios de aprendizaje a medida los cuales se van adaptando al usuario conforme a su progreso y aspiraciones.

“Nuestro producto es el primero en ofrecer la posibilidad de establecer una comunicación bidireccional con los usuarios a través de su progreso aprendiendo o perfeccionando el aprendizaje de un instrumento”, afirman. La oferta la extienden a la comunidad de la docencia musical.

Aunque el Producto Mínimo Viable (MVP) no se lanza hasta febrero de 2022, Meloom nace en 2020, al inicio de la pandemia, pensando que, en tiempos como los que se vivían entonces, aprender a tocar un instrumento sería una forma más amena, enriquecedora y saludable de atravesarlo. La música desde una perspectiva de la salud mental, es algo que echaron de menos en los más de 20 negocios de la competencia que analizaron antes de comenzar con el desarrollo, de aquí que la solución cuente, también, con un equipo de musicoterapeutas que ofrecen charlas, cuestionarios y otras actividades a los usuarios de Meloom.

Ingresos por suscripción

Aseguran que las ventas empezaron a llegar desde el primer día con una facturación prevista para el cierre de 2024 de 190.000 euros, el cuádruple que el año anterior. El principal motor de este crecimiento corresponde a los ingresos por suscripción. Tampoco les ha faltado financiación contando con el apoyo de business angels y subvenciones casi desde el origen, pero cuidando no diluir en exceso el capital de la compañía.

Una de las firmas que han apostado por su emprendimiento es Oryon Universal. Se suma a ello una campaña de crowdfunding que activaron en la plataforma Fellow Funders para avanzar en el desarrollo tecnológico, acometer alianzas estratégicas en marketing y ventas y producir contenido. El objetivo, no obstante, es terminar “siendo participada por una gran empresa como Spotify, Apple, Microsoft o Tencent”.

Entre los hitos alcanzados hasta la fecha, citan, en primer lugar, haber conseguido reducir la tasa de abandono de los que empiezan a aprender a tocar un instrumento, de un 22% a por debajo del 3% en apenas 12 meses. Asimismo, han pasado por el prestigioso del programa de inversión de impacto Tiina 2024 de la fundación Dani y Nina Carasso y Ship2B y fueron seleccionados, de entre más de 160 startups a escala europea, para el Music Tech Europe Academy 2023.

Wuanap: un collar salvavidas para actividades acuáticas

Wuanap es una startup española que ha creado y patentado un collar salvavidas inteligente para actividades acuáticas. La idea de negocio ha sorprendido tanto que la ha hecho merecedora del premio a la Startup Más Invertible en fase seed del WaykUP, feria de emprendimiento y foro de inversores y startups.

La idea de Wuana, fundada por Ignacio Cuesta, convenció a los inversores asistentes de que se trata de una startup que reúne elementos como innovación, tecnología, solución a un problema y rentabilidad; negocio, escalabilidad.

Wuanap es un dispositivo capaz de prevenir el ahogamiento de cualquier persona que realiza una actividad acuática, exceptuando a los buceadores con botella. Se trata de un collar con base de neopreno que detecta si una persona se ha quedado inconsciente o inmóvil en el agua. Si esto sucede, se activa el inflado del airbag incorporado alrededor del cuello para alzar la cabeza del usuario hasta la superficie, donde el afectado podrá recuperar la conciencia y la respiración de manera automática.

Al contrario del funcionamiento de un chaleco salvavidas, el collar estará a disposición de un surfista o un triatleta, además de otro tipo de usuarios, ya que este collar sí les permite realizar su actividad sin problema alguno.

Financieramente sostenibles

La startup ha cerrado hasta la fecha dos rondas de financiación con business angels y el grupo Innoventures para crear un producto óptimo para el mercado al que se dirige. Actualmente, valoran diferentes propuestas de financiación para cubrir la fabricación de 1.000 unidades y, así, hacer frente a una demanda ya existente.

Según su fundador, “la clave diferencial es que nosotros seremos financieramente sostenibles desde la primera venta, ya que tendremos beneficios el mismo primer año de lanzamiento. Proporcionamos seguridad de vida en un océano azul enorme, con un potencial real de multiplicar el valor de la empresa por 1.000 sin necesidad de hacer pronósticos irreales gracias a una escalabilidad palpable. El gran riesgo del proyecto era conseguir un producto real y que su comodidad fuera aprobada por triatletas, que son los más exigentes, ya que nadarán horas y horas con él puesto. Eso ya lo tenemos”.

El proyecto lo avalan figuras de la talla de Jamie Mitchell, prestigioso surfista internacional, o Alejandro Santamaría, campeón del mundo en diferentes categorías de duatlón y triatlón

Ana Delgado

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