¿Cómo debes hablarle a la IA para que te entienda?: Burns nos da las claves en CONECTADOS 2025

Siempre se ha dicho que la comunicación es la base del entendimiento. Sin embargo, la complejidad de hacernos entender ha alcanzado en el presente una nueva dimensión. Hasta ahora, esa interacción bidireccional se había dado entre humanos, pero en el presente se extiende al mundo digital con el surgimiento de los chatbots, esos intangibles seres con los que ya casi conversamos más que con algún familiar o amigos cercanos. De eso versa la presentación de Alejandro Barranquero, Digital Consultant en Burns, quien está presente en CONECTADOS 2025 para ayudarnos a comunicarnos de un modo más efectivo con estos nuevos compañeros digitales.

Barranquero arranca con humor, estableciendo una analogía entre su relación con la IA y una historia de amor contemporánea: «Nos conocimos en una app», bromea, mientras repasa su primer acercamiento —no tan exitoso— con modelos como ChatGPT. De este modo, presenta el tema principal de su conferencia, enfocado en cómo las marcas pueden aprovechar la inteligencia artificial generativa y predictiva para vender más, automatizar mejor y conectar con sus consumidores a todos los niveles del funnel.

«Venimos a hablar de cómo la IA puede hacer crecer un ecommerce, pero no desde el hype, sino desde el uso práctico y medible», asegura. Y lo deja claro desde el principio: si las marcas no entienden cómo hablar con la IA, no podrán aprovechar su verdadero potencial.

¿Qué es (y qué no es) la IA?
Alejandro empieza abordando una de las confusiones más comunes: «Esto no es magia, y tampoco es machine learning tradicional», dice mientras proyecta un gráfico comparativo entre modelos predictivos y generativos. Se detiene en el concepto de «alucinaciones», esas respuestas incorrectas pero verosímiles que puede generar una IA como ChatGPT, y señala un elemento clave: la temperatura.

La temperatura en un prompt regula el nivel de creatividad del modelo, explica. Si le pides algo con alta temperatura, obtendrás ideas locas, incluso absurdas. Si la bajas, será más conservador. A más temperatura, más ocurrencias inesperadas.

Este enfoque técnico, pero explicado con claridad, prepara el terreno para lo realmente importante: cómo estructurar un buen prompt.

Cómo hablarle bonito a tu IA
«La IA no te va a entender si no sabes hablarle bien», afirma. Por eso, Alejandro propone una estructura simple y poderosa para construir prompts efectivos:

Tarea: ¿Qué quieres que haga?
Contexto: ¿Qué información necesita para responder correctamente?
Ejemplo: ¿Puedes darle una muestra de lo que esperas?
Rol: ¿Desde qué perspectiva debe responder? ¿Es un redactor, un analista, un jefe de producto?
Formato: ¿Quieres una lista, un texto largo, un resumen?
Tono: ¿Debe sonar formal, cercano, divertido?
Con esta fórmula, Alejandro invita al público a «coquetear» con la IA, a entrenarla, ajustarla y, sobre todo, a no temerle. Ponía como ejemplo la creación de un poema en el que, a través del perfeccionamiento del prompt, iba alcanzando un resultado mucho más óptimo y medido.

Cuando la IA se vuelve parte del equipo

La segunda parte de su charla se centra en cómo la IA puede integrarse en el día a día de un equipo digital. Y lo hace desde una óptica muy práctica: la IA como asistente de tareas que van desde la generación de ideas hasta la automatización de respuestas en atención al cliente.

Alejandro habla de las personalidades múltiples de la IA —celosa, chismosa, rencorosa— con tono irónico, pero aterriza ese humor en un punto serio: la IA aprende, guarda contexto, y puede ser tanto una aliada como una fuente de problemas si no se gestiona bien.

También destaca funcionalidades como los GPTs personalizados, el fine tuning y el uso de modelos como RAG, que permiten adaptar los sistemas a las necesidades específicas de cada marca o cliente.

La IA también trabaja para la IA

El momento más llamativo de la charla llega con el concepto de «toolchaining». Alejandro lo ilustra con un caso práctico: escribe un prompt en ChatGPT, lo usa para generar una imagen en MidJourney, y con esa imagen crea un vídeo en Sora. Todo esto, automatizado en cadena.

«La IA genera el prompt, que se convierte en imagen, que se convierte en vídeo. Y yo le digo a mi jefa que lo he hecho todo yo», bromea. Pero el mensaje es claro: la automatización inteligente ya no es el futuro, es el presente.

Cuando tú tienes una cuenta gratuita en una IA, esta utiliza tus datos los utiliza para construir su propio modelo, pero cuando tienes una cuenta enterprise, todos los datos que le des los utiliza para tu propio modelo.

Social listening, automatización y CRM: una palanca para todo el funnel

En la recta final de su intervención, Alejandro conecta todas estas herramientas con la estrategia de eCommerce. Recurre a un esquema que va desde el upper funnel (atracción) hasta el low funnel (conversión y fidelización), mostrando cómo la IA puede actuar en cada fase:

  • Reconocimiento: escucha social para captar tendencias y analizar el sentimiento hacia la marca.
  • Cualificación: generación de leads, detección de pain points, segmentación automatizada.
  • Engagement: personalización de mensajes, chatbots, contenido generado en tiempo real.
  • Conversión y fidelización: CRM predictivo, automatización de campañas, contenido dinámico.

Alberto Pérez

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